El abordaje de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) enfrenta distintos desafíos que han de responder a las exacerbaciones que pueden sufrir los pacientes y a los síntomas frecuentes de esta patología: tos crónica, falta de aire, expulsión de flemas, dolor en el pecho al toser o bronquitis recurrentes. También a su calidad de vida y las diferentes problemáticas que con la EPOC se pueden desarrollar.
Uno de los grandes pasos que se está dando es la implicación de la IA en el día a día de la EPOC. De esta forma, gracias a la IA, los expertos reconocen que se está mejorando la atención de los pacientes, así como el seguimiento de aquellos que precisan terapias respiratorias domiciliarias.
Además, la inteligencia artificial ha demostrado ser crucial en la personalización de tratamientos al analizar datos individualizados para adaptar estrategias de manejo que se ajusten a las necesidades específicas de cada individuo. Esto no solo mejora la eficacia del tratamiento, sino que también reduce la probabilidad de efectos secundarios no deseados. Asimismo, en el ámbito de la investigación, la inteligencia artificial facilita el análisis de datos a gran escala, acelerando el descubrimiento de nuevos enfoques terapéuticos y biomarcadores. Esto no solo beneficia a los pacientes actuales, sino que sienta las bases para futuras innovaciones en la prevención y tratamiento de la EPOC.
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