¿Cómo afecta el cambio de horario al cuerpo humano?

Evaluar el cambio de horario en términos de salud no resulta sencillo. Veamos los pros y los contras.

La invención de la luz eléctrica ha generado cambios profundos en los ritmos diarios de las sociedades modernas, pero aun así todavía seguimos el ciclo principal de día y noche.

La alteración de este ritmo, por ejemplo, en personas que trabajan en turno de noche, provoca efectos agudos —como somnolencia y falta de atención, lo que a su vez se traduce en un aumento de los accidentes— y también efectos a largo plazo, como obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y probablemente cáncer. Cambios más leves en los horarios, como por ejemplo ser sacados del sueño por un despertador a las 7 de la mañana en el mes de febrero, a una hora que nuestro cuerpo cree que es aún de noche, también suponen una anomalía. Igual que exponerse tras la puesta de sol y durante horas a pantallas de móviles o tablets o a iluminación LED que emita luz de onda azul, lo cual provoca una reducción de nuestros niveles de melatonina, la hormona que nos ayuda a regular el sueño.

Seguir con el cambio de horario implicaría continuar provocando jetlag, molestias y alteraciones de sueño dos veces al año a prácticamente toda la población europea —concretamente a 512,6 millones de habitantes—, incluidos aquellos que son más sensibles a los cambios, como los niños o las personas enfermas.

https://www.lavanguardia.com/ciencia/20181027/452544831486/cambio-hora-efecto-salud.html